Una historia de tierra y pasión, la de la familia Apollonio, inextricablemente entrelazada con el destino de la bodega Apollonio, que hoy exporta a más de 30 países de todo el mundo y sigue produciendo vino con los mismos métodos apreciados por sus fundadores, aplicando al mismo tiempo las tecnologías más avanzadas, desde la optimización del proceso de producción hasta la comercialización de sus etiquetas. La historia de la bodega Apollonio hunde sus raíces en 1870. Desde entonces, se ha prestado especial atención a la valorización de las variedades de uva identitarias del Salento (principalmente Negroamaro y Primitivo, pero también Malvasia nera, Susumaniello, Bianco d'Alessano), a la cuidadosa selección de los tipos de madera utilizados para los largos procesos de envejecimiento y al fuerte vínculo con el territorio que siempre ha sido protagonista de una producción de calidad.
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