Florio

Fundada en 1833 por Vincenzo Florio, la Cantine Florio de Marsala domina el mar de Sicilia occidental. Envueltas por la energía de los vientos, saboreadas por el mar, las bodegas acogen, bellas y silenciosas, las barricas de roble donde envejecen los Marsala de Florio en un movimiento aparentemente inmóvil. Cientos de barricas, cubas y toneles, cada uno con su propia historia, respiran el mar a través del suelo de toba, en los altos pasillos donde se mezclan aromas y arquitectura. En este maravilloso lugar, donde se destila la idea siciliana de la belleza, nuestro enólogo, mediante el hábil uso del espacio, el tiempo y el oxígeno, crea el Marsala en sus múltiples formas organolépticas.

Fundada en 1833 por Vincenzo Florio, la Cantine Florio de Marsala domina el mar de Sicilia occidental. Envueltas por la energía de los vientos, saboreadas por el mar, las bodegas acogen, bellas y silenciosas, las barricas de roble donde envejecen los Marsala de Florio en un movimiento aparentemente inmóvil. Cientos de barricas, cubas y toneles, cada uno con su propia historia, respiran el mar a través del suelo de toba, en los altos pasillos donde se mezclan aromas y arquitectura. En este maravilloso lugar, donde se destila la idea siciliana de la belleza, nuestro enólogo, mediante el hábil uso del espacio, el tiempo y el oxígeno, crea el Marsala en sus múltiples formas organolépticas.

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