Villa Diamante

El nombre de Villa Diamante está estrechamente ligado al de Antoine Gaita, figura central en el desarrollo del vino blanco irpiniano, experto bioquímico y experimentador, recientemente fallecido. Antoine, buen conocedor de los procesos de vinificación, fundó la bodega en 1996 junto con su esposa Diamante Renna en la colina de Montefredane, en la provincia de Avellino: un paisaje lleno de encanto, caracterizado por sus empinadas laderas y sus encantadoras vistas. Los viñedos, situados a unos 400 metros de altitud, se explotan de forma ecológica, con pleno respeto por la naturaleza y una práctica agronómica tradicional que permite la mínima intervención del hombre. El suelo es profundo, rico en arcilla, piedras y antiguos lapilli procedentes de las erupciones del Vesubio, excepcionalmente adecuado para las variedades de uva blanca. Incluso en la bodega, el trabajo se basa más en la observación que en la intervención humana: fermentación espontánea, sin clarificación ni filtrado, largas estancias en acero. El contacto prolongado con las lías, antes de que se convirtiera en una moda, se practicó en Villa Diamante desde el principio y representó una gran novedad en toda Irpinia. Los vinos producidos están dotados de un carácter estilístico muy original, centrado en la búsqueda de la madurez y la densidad interna, fruto de métodos de producción artesanales y de crianzas puntuales y prolongadas. Son vinos ligados al nombre de Fiano di Avellino, que han recibido premios y menciones y se han convertido ya en legendarios, gracias sobre todo a esa notable potencia en boca que los hace competir con los mejores vinos blancos de todo el mundo, expresión de una poética fundada en la riqueza de aromas pero también en la profundidad de sabor.