Michele Chiarlo

En las tres zonas piamontesas donde se encuentran nuestras instalaciones -Langhe, Monferrato y Gavi- contamos con 110 hectáreas de viñedo: 60 en propiedad y 50 arrendadas a largo plazo. Un equipo técnico coordinado por el enólogo Stefano Chiarlo se encarga de su gestión y se encarga de controlar escrupulosamente su cultivo para producir una gran calidad respetando estrictos criterios ecológicos. En particular, se llevan a cabo: podas equilibradas y severas en función de los objetivos enológicos; tratamientos fungicidas con productos de bajo impacto ambiental siguiendo la técnica de control guiado de plagas; deshojado manual meticuloso; pasto entre hileras; no utilización de productos antimoho.

Desde los años ochenta, hemos comprendido que se puede obtener una extraordinaria elevación de la calidad reduciendo el rendimiento por cepa -muy bajo para los vinos de gama alta y moderado para los vinos clásicos- mediante un aclareo severo de los racimos y fuimos de los primeros en Piamonte en adoptar esta operación. Por último, la realización de la vendimia en función de los índices de maduración fenólica nos ha permitido producir vinos con mayor concentración y sabores más armoniosos.

Un viñedo situado en grandes terruños, junto con una gestión meticulosa y apasionada del viñedo, son los verdaderos "secretos" para producir una gran calidad. Nuestros principales objetivos han sido siempre tener viñedos únicamente en laderas prestigiosas y dedicar nuestros mayores esfuerzos a su cuidadoso cultivo, tratando de introducir mejoras en la gestión cada año.

En las tres zonas piamontesas donde se encuentran nuestras instalaciones -Langhe, Monferrato y Gavi- contamos con 110 hectáreas de viñedo: 60 en propiedad y 50 arrendadas a largo plazo. Un equipo técnico coordinado por el enólogo Stefano Chiarlo se encarga de su gestión y se encarga de controlar escrupulosamente su cultivo para producir una gran calidad respetando estrictos criterios ecológicos. En particular, se llevan a cabo: podas equilibradas y severas en función de los objetivos enológicos; tratamientos fungicidas con productos de bajo impacto ambiental siguiendo la técnica de control guiado de plagas; deshojado manual meticuloso; pasto entre hileras; no utilización de productos antimoho.

Desde los años ochenta, hemos comprendido que se puede obtener una extraordinaria elevación de la calidad reduciendo el rendimiento por cepa -muy bajo para los vinos de gama alta y moderado para los vinos clásicos- mediante un aclareo severo de los racimos y fuimos de los primeros en Piamonte en adoptar esta operación. Por último, la realización de la vendimia en función de los índices de maduración fenólica nos ha permitido producir vinos con mayor concentración y sabores más armoniosos.

Un viñedo situado en grandes terruños, junto con una gestión meticulosa y apasionada del viñedo, son los verdaderos "secretos" para producir una gran calidad. Nuestros principales objetivos han sido siempre tener viñedos únicamente en laderas prestigiosas y dedicar nuestros mayores esfuerzos a su cuidadoso cultivo, tratando de introducir mejoras en la gestión cada año.

Mostrar más Mostrar menos