Graziano Merotto

Graziano Merotto nació aquí, en Col San Martino, una aldea rural entre prados y laderas aún lejos del esplendor que se convertiría en el centro de la futura producción de burbujas. Graziano procedía de una familia de agricultores dedicados a la producción vinícola y creció con un proyecto que hoy llamaríamos visionario, pero que en su momento se consideró audaz: dar dignidad al Prosecco, iniciando una investigación a largo plazo basada en la vinificación de fermentación natural. Las manos dan forma a cada espacio, son raíz y voluntad. Al repetir gestos antiguos, guardan secretos de otro modo olvidados, y los reproponen según un estilo y una personalidad contemporáneos. "Porque las manos cuentan, como las miradas y los silencios. En las manos, como en los troncos de los árboles, leemos las líneas y las curvas de una existencia. La dulzura, la fatiga, el sufrimiento, el surco de las cosas con las que hemos estado en contacto, que nos han caracterizado, colándose entre los pliegues y más allá" (extraído del libro: Me la ricordo come una giornata felice)

Graziano Merotto nació aquí, en Col San Martino, una aldea rural entre prados y laderas aún lejos del esplendor que se convertiría en el centro de la futura producción de burbujas. Graziano procedía de una familia de agricultores dedicados a la producción vinícola y creció con un proyecto que hoy llamaríamos visionario, pero que en su momento se consideró audaz: dar dignidad al Prosecco, iniciando una investigación a largo plazo basada en la vinificación de fermentación natural. Las manos dan forma a cada espacio, son raíz y voluntad. Al repetir gestos antiguos, guardan secretos de otro modo olvidados, y los reproponen según un estilo y una personalidad contemporáneos. "Porque las manos cuentan, como las miradas y los silencios. En las manos, como en los troncos de los árboles, leemos las líneas y las curvas de una existencia. La dulzura, la fatiga, el sufrimiento, el surco de las cosas con las que hemos estado en contacto, que nos han caracterizado, colándose entre los pliegues y más allá" (extraído del libro: Me la ricordo come una giornata felice)

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