Tenuta Sant'Aquilina

Somos una empresa formada por jóvenes que tienen un sueño: cultivar una tierra única, producir vinos y aceites de gran calidad, expresión de un territorio generoso encerrado entre las colinas y el mar Adriático. Nuestra ambición es transmitir a nuestros productos los olores y sabores de la tierra y el mar: no es tarea fácil, pero soñar con ello nos acerca a la meta. Todo empieza en la tierra. Enrico y Andrea cuidan cada día nuestros viñedos y olivares según métodos ecológicos. La pasión de nuestros enólogos Alberto y Stefano es garantía del máximo cuidado de los tesoros que nos entrega la tierra. El agrónomo Claudio con su sabiduría y gran experiencia coordina todas las fases del viñedo y la bodega. Gianluca con pasión, profesionalidad y competencia les presenta los preciosos frutos de nuestro trabajo. Cumplimos un sueño: volvemos al verde y redescubrimos la pasión. De varias fincas y entre espléndidos viñedos y olivares nace nuestra granja, orgullosa de los productos y sabores auténticos que ofrece la más generosa de las tierras: las Colinas de Rímini, en Romaña. En el corazón de la Rímini más verde, en una cresta soleada se encuentra la aldea de Sant'Aquilina, rodeada por las colinas de Covignano, San Fortunato y Cerasolo. Aquí la brisa del mar Adriático se mezcla con los plácidos vientos de la tierra. La finca consta de unas 46 hectáreas de terreno, 24 de las cuales son viñedos y 9 olivares. Tenuta Sant'Aquilina es también una visión de futuro: desde el antiguo caserío con vistas a la República de San Marino, se construirá un nuevo caserío que albergará la sede, la bodega y el salón para eventos. Inmerso en el viñedo, un lugar para saborear la tradición respetando la naturaleza.