Leclerc Briant

l Domaine Leclerc fue fundado en 1872 en Cumiéres por Lucien Leclerc. Fue entonces, en 1955, cuando la propiedad familiar se transformó en "Maison" y Louis-Bertrand Leclerc combinó su nombre con el de su esposa Jacqueline Briant para crear la Maison Leclerc Briant con una nueva sede en Epernay. Posteriormente, su hijo Pascal continuó la senda de experimentación biológica de su padre aplicando la agricultura biodinámica a sus 30 hectáreas de propiedad desde 1964. En 2010, Leclerc Briant es el mayor productor biodinámico de Champagne y el primero, en 1994, en ofrecer Champagne procedente de un único viñedo, el "Lieux-dits". Desgraciadamente, Pascal murió prematuramente en 2010 y la Maison inició un periodo de incertidumbre que la llevó a vender cerca del 75% de sus activos vitícolas, hasta que fue comprada en 2012 por una pareja de entusiastas estadounidenses. La idea no era revolucionarla, sino revivirla, por lo que confiaron la gestión de la Maison y de las 7 hectáreas restantes a Frédéric Zeimett acompañado de la hija mayor de Pascal: Ségolène Leclerc. Hoy el Domaine está certificado biodinámicamente con una producción que ronda las 200.000 botellas, sin duda interesantes Champagnes que merecen ser descubiertos.

l Domaine Leclerc fue fundado en 1872 en Cumiéres por Lucien Leclerc. Fue entonces, en 1955, cuando la propiedad familiar se transformó en "Maison" y Louis-Bertrand Leclerc combinó su nombre con el de su esposa Jacqueline Briant para crear la Maison Leclerc Briant con una nueva sede en Epernay. Posteriormente, su hijo Pascal continuó la senda de experimentación biológica de su padre aplicando la agricultura biodinámica a sus 30 hectáreas de propiedad desde 1964. En 2010, Leclerc Briant es el mayor productor biodinámico de Champagne y el primero, en 1994, en ofrecer Champagne procedente de un único viñedo, el "Lieux-dits". Desgraciadamente, Pascal murió prematuramente en 2010 y la Maison inició un periodo de incertidumbre que la llevó a vender cerca del 75% de sus activos vitícolas, hasta que fue comprada en 2012 por una pareja de entusiastas estadounidenses. La idea no era revolucionarla, sino revivirla, por lo que confiaron la gestión de la Maison y de las 7 hectáreas restantes a Frédéric Zeimett acompañado de la hija mayor de Pascal: Ségolène Leclerc. Hoy el Domaine está certificado biodinámicamente con una producción que ronda las 200.000 botellas, sin duda interesantes Champagnes que merecen ser descubiertos.

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