Capannelle

La historia de la bodega Capannelle comenzó en 1974, cuando el empresario Raffaele Rossetti se instaló en una antigua granja del siglo XVII rodeada de 10,5 hectáreas de terreno en Gaiole in Chianti, la cuna del vino Chianti Classico. Tras un cuidadoso análisis, se comenzó a trabajar en una nueva plantación de 3,5 hectáreas de viñedos especializados en variedades de uva autóctonas como Sangiovese, Canaiolo, Colorino y Malvasia nera. La casa de labranza se está renovando y restaurando para devolverle su antiguo esplendor. Las novedades incluyen la introducción de una nueva cocina, donde chefs de renombre maridan los vinos Capannelle con sus creaciones, y una gran sala de degustación, caracterizada por una "fratina" del siglo XVII de 6 metros de largo. También se instala una bodega ultramoderna bajo la masía, con conexiones y tuberías de acero inoxidable de última generación para la tecnología de la época. La primera etiqueta data de 1975: es un vino de mesa que simplemente lleva el nombre de Capannelle. Este primer ensayo llevó a la empresa a emerger en el panorama de los productores de calidad, gracias a la cuidadosa gestión de los viñedos y al uso de tecnología moderna. En 1977 se introdujeron las barricas del Macizo Central francés, que en pocos años se convirtieron en un culto entre los amantes del vino. En 1986, comenzó la experimentación con el vino blanco: al cabo de dos años, nació nuestro Capannelle Chardonnay, fermentado y envejecido en barricas. Los vinos Capannelle se distribuyen actualmente en 35 países de todo el mundo, y entre sus clientes se cuentan hoteles de prestigio, restaurantes de calidad y vinotecas cualificadas. La red de ventas se divide entre Italia (30%), países extranjeros (60%) y clientes particulares (10%). Capannelle también cuenta con un Wine Resort que ofrece 5 habitaciones amuebladas y cuidadas hasta el más mínimo detalle durante todo el año, para quienes deseen vivir una experiencia inolvidable en el corazón de la región del Chianti Classico. También hay a disposición de los huéspedes una piscina panorámica, un salón con chimenea, así como terrazas y un jardín de estilo inglés con vistas a las onduladas colinas del Chianti.

La historia de la bodega Capannelle comenzó en 1974, cuando el empresario Raffaele Rossetti se instaló en una antigua granja del siglo XVII rodeada de 10,5 hectáreas de terreno en Gaiole in Chianti, la cuna del vino Chianti Classico. Tras un cuidadoso análisis, se comenzó a trabajar en una nueva plantación de 3,5 hectáreas de viñedos especializados en variedades de uva autóctonas como Sangiovese, Canaiolo, Colorino y Malvasia nera. La casa de labranza se está renovando y restaurando para devolverle su antiguo esplendor. Las novedades incluyen la introducción de una nueva cocina, donde chefs de renombre maridan los vinos Capannelle con sus creaciones, y una gran sala de degustación, caracterizada por una "fratina" del siglo XVII de 6 metros de largo. También se instala una bodega ultramoderna bajo la masía, con conexiones y tuberías de acero inoxidable de última generación para la tecnología de la época. La primera etiqueta data de 1975: es un vino de mesa que simplemente lleva el nombre de Capannelle. Este primer ensayo llevó a la empresa a emerger en el panorama de los productores de calidad, gracias a la cuidadosa gestión de los viñedos y al uso de tecnología moderna. En 1977 se introdujeron las barricas del Macizo Central francés, que en pocos años se convirtieron en un culto entre los amantes del vino. En 1986, comenzó la experimentación con el vino blanco: al cabo de dos años, nació nuestro Capannelle Chardonnay, fermentado y envejecido en barricas. Los vinos Capannelle se distribuyen actualmente en 35 países de todo el mundo, y entre sus clientes se cuentan hoteles de prestigio, restaurantes de calidad y vinotecas cualificadas. La red de ventas se divide entre Italia (30%), países extranjeros (60%) y clientes particulares (10%). Capannelle también cuenta con un Wine Resort que ofrece 5 habitaciones amuebladas y cuidadas hasta el más mínimo detalle durante todo el año, para quienes deseen vivir una experiencia inolvidable en el corazón de la región del Chianti Classico. También hay a disposición de los huéspedes una piscina panorámica, un salón con chimenea, así como terrazas y un jardín de estilo inglés con vistas a las onduladas colinas del Chianti.

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