Fundada en 1985, Cloudy Bay fue una de las cinco primeras bodegas que se aventuraron en Marlborough. En aquella época, era un lugar casi inimaginable para establecer un viñedo. Pero el fundador de Cloudy Bay, David Hohnen, estaba convencido de su potencial para producir grandes vinos e invirtió en las mejores tierras de la región. Desde entonces, Marlborough ha crecido hasta convertirse en la principal región vinícola de Nueva Zelanda, así como en uno de los mejores lugares del mundo para la producción de vino. La bodega debe su nombre a Cloudy Bay, una masa de agua que el explorador capitán James Cook encontró durante su viaje a Nueva Zelanda en 1770. Su descubrimiento coincidió con una inundación en la región, que arrastró grandes cantidades de sedimentos al mar. Al observar el aspecto opaco del agua, Cook bautizó la zona con el ingenioso nombre de Bahía Nublada. Hoy, Cloudy Bay no sólo capta la esencia de Marlborough, sino que encarna el lujo de Nueva Zelanda para el mundo. El lujo del espacio y el tiempo, de los momentos íntimos y las cualidades más raras de la naturaleza.