La bodega fue fundada en 1939 por Giacobbe Leopoldo cuando compró una pequeña parcela de tierra justo en la cima de la colina de San Giovenale, una posición ideal para el cultivo de la vid. Posteriormente fue su hijo Alino quien continuó la labor iniciada por su padre, ampliando la empresa hasta su tamaño actual. En 2006 comenzó la actividad de embotellado gracias al empuje de su hijo Alberto, que en 2008 se hizo cargo de toda la empresa, que actualmente ocupa una superficie total de unas 15 hectáreas situadas en los municipios de Paliano, Piglio y Olevano Romano. Las colinas bañadas por el sol que caracterizan esta zona, los muchos años de experiencia acumulada y la dedicación de toda la familia garantizan la elaboración de productos de alta calidad, en primer lugar el preciado vino Cesanese y Passerina del Frusinate. Además de la producción de vino, que es la actividad principal, la empresa se ha comprometido a producir un excelente aceite de oliva virgen extra, obtenido principalmente de aceitunas cosechadas en las zonas asignadas en el municipio de Piglio.