En el mundo del vino hay muchos buenos viticultores. Sin embargo, sólo unos pocos son verdaderamente grandes, y Auguste Clape se encuentra entre ellos. Críticos y entendidos coinciden en que es uno de los grandes pioneros del Ródano septentrional y sus Syrah del cru de Cornas figuran entre los vinos más célebres de Francia. La familia Clape fue viticultora durante muchas generaciones, pero las tristemente célebres huelgas de 1906 y 1907 obligaron a su abuelo a abandonar Languedoc y empezar prácticamente de cero en el norte del Ródano. Los Clape reconstruyeron su fortuna, terraza a terraza, a lo largo de las empinadas laderas occidentales del río Ródano. Durante muchos años, la mayoría de los viticultores de Cornas vendieron su fruta a los recién casados. Auguste fue el primero en embotellar su vino, que acabó allanando el camino a superestrellas contemporáneas como Thierry Allemand. Auguste, antiguo alcalde de Cornas, sin pretensiones ni fanfarrias, es una majestuosa estampa de gracia y magnanimidad, un sabio al que aún le interesa aprender. Hoy trabaja codo con codo con su hijo, Pierre-Marie, y su nieto, Olivier.