La familia Drius cultiva 15 hectáreas de viñedo, desde el verde monte Quarin que domina Cormòns hasta la Alta Llanura surcada por el azul del río Isonzo. Dos zonas DOC consagradas a vinos de asombrosas características cualitativas por su perfecta exposición al sol y su clima ideal, protegidos por las altas cumbres de los Alpes y mitigados por las brisas del cercano Adriático. Dos grandes tierras extraordinariamente aptas para la viticultura, profundamente diferentes pero contiguas, que los vinos Drius saben interpretar al máximo. Las suaves colinas de Collio se caracterizan por la alternancia de arenisca y marga: producen extraordinarios blancos, secos y fragantes. Las dos líneas que, superpuestas, sostienen el nombre Drius en la marca de la empresa representan precisamente el hecho de que, en sus viñedos, el Collio y el Isonzo se encuentran y, en su bodega, encuentran una síntesis perfecta.