Zardetto

Han pasado casi cien años desde el día en que Bepi Zardetto perdió su carro, sus caballos y toda su carga de barriles durante la retirada de Caporetto, en el frente italiano de la Primera Guerra Mundial. Cien años que han visto a una familia trazar su historia a lo largo de una línea recta y continua, marcada por el trabajo y la pasión de sus miembros. Entre la medalla de plata que concedió a Ernesto Zardetto en 1934 en la categoría Vini Dolci (o, como él los llamaba, vin da botìglia) y la afirmación del Prosecco Zardetto en el mercado internacional y en las mesas de todo el mundo, sólo hay el largo y fructífero camino de la misma y extraordinaria dedicación a la vinificación que los Zardetto han transmitido de padres a hijos.

Después de Bepi, Ernesto y Pino, protagonistas silenciosos de una historia ininterrumpida, le llegó el turno a Fabio, propietario único desde 1998, de dar nuevos bríos a la empresa. Firme creyente en la necesidad de dedicarse exclusivamente a la producción especializada de Prosecco Spumante, en 2002 inició las obras de construcción de la nueva bodega, dotada de tecnología punta. Su constante búsqueda de la excelencia se traduce así en un gran impulso a la modernización de las técnicas del vino espumoso, la organización óptima de la producción y la colaboración constructiva con sus enólogos de confianza en los viñedos más adecuados.


Fabio Zardetto, cuidadoso seleccionador de uvas y gran conocedor de los terruños de Conegliano Valdobbiadene, desea firmemente que sus vinos sean la expresión de las diferentes especificidades de cada viñedo, fruto de su investigación personal y de su amor por su tierra.