Somos una familia de viticultores que desde hace más de 150 años se dedica con pasión al cultivo del Nebbiolo, una variedad de uva poco común que a lo largo de los siglos ha sabido adaptarse a la Valtellina: un territorio único donde todo se sigue elaborando a mano. Durante cinco generaciones, "el tiempo justo de espera" ha marcado el ritmo de nuestras elecciones, y es así como buscamos humildemente elaborar un vino que sea la expresión más pura y sincera de la tierra y de los hombres que la cultivan con dedicación, como nos enseñó nuestro padre Arturo, sin dejarnos condicionar por modas y gustos convencionales. La Valtellina es un valle encerrado entre los Alpes Réticos y los Montes Orobie, que discurre paralelo al arco alpino y se beneficia de un microclima único. Desde el amanecer hasta el anochecer, el sol calienta el viñedo en terrazas, enclavado como una piedra rara en la ladera rética, completamente expuesto al sur y mitigado por los frescos vientos del norte. Estamos convencidos de que el Nebbiolo delle Alpi, por su marcada originalidad, merece un puesto de honor en el mercado internacional del vino de calidad: un reconocimiento fundamental para hacer económicamente sostenible una actividad centenaria que difícilmente encaja en las lógicas modernas de producción.
En Ar.Pe.Pe, incluso las innovaciones siguen la regla del tiempo: la evolución no viene dictada por la moda, sino que responde a la necesidad de mejorar todos los aspectos de la producción. Creemos, de hecho, que la verdadera innovación consiste en saber captar la esencia de la tradición, perfeccionándola continuamente hasta el más mínimo detalle.
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