Adega do Vulcao

La de Adega do Vulcão es la historia de un vínculo entre una pareja florentina y las islas Azores, nacido casi por casualidad en 2008. Este lugar único les llamó la atención y decidieron establecer aquí su buen retiro. Con el tiempo, sus estancias se han ampliado, esta tierra ejerce su poderoso encanto y nacen deseos y proyectos. El primero les vincula al vino. Es Adega do Vulcão, la bodega del volcán, que a través de la paciente recuperación de cepas autóctonas en un terruño peculiar, ofrece bajo su etiqueta pequeñas producciones de vinos con personalidad definida. Adega nació en la isla de Faial, cerca del volcán dos Capelinhos formado en 1957 tras una erupción que se inició en el mar a una milla de la costa. La arena y las cenizas expulsadas por el volcán durante más de un año sumergieron las tierras circundantes, creando en las décadas siguientes un terruño sin igual. Pronto, el proyecto se extendió a la isla de Pico, donde hermosos viñedos declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO están plantados en la corteza de lava. Dos islas, dos terruños volcánicos diferentes para una marca que expresa el amor por la naturaleza extrema y su relación con el hombre.