Artadi, una historia ligada a la memoria y al saber de nuestros antepasados, no industrial y basada en la pasión y el respeto por el viñedo. 1985, Laguardia. Un grupo de viticultores, hombres y mujeres de pueblo con arraigadas tradiciones y volcados en sus viñedos y vinos, fundan Artadi. En 1992, la familia Lacalle y Laorden se hace cargo del proyecto. Nuestra obsesión por el cultivo de la vid y nuestro culto por el viñedo nos llevaron a descubrir las características que definen la personalidad de unos vinos únicos: vinos que son reflejo de su origen. Esta misma convicción nos llevó a ampliar nuestro proyecto en 1996 en Navarra (Artazu), en 1999 en Alicante (El Sequé) y en 2015 en Guipúzcoa (Izar-Leku). Las experiencias de nuestros abuelos se han convertido en sabiduría y modelo de vida. Mantenemos vivas las tradiciones vitivinícolas de nuestros antepasados, luchando contra los avances destructivos que la química ha introducido en la gestión agrícola industrializada e irrespetuosa. Queremos preservar la elaboración y el disfrute de un vino "vivo", con sentimientos y espiritualidad, integrando la naturaleza y el viñedo en nuestras vidas.