El vino es pasión, interpretación, implicación artística. La fuerte identidad de un territorio se pinta en el vino: el Langa de Monforte d'Alba. Desde hace más de treinta años concebimos así el viñedo, las uvas, el vino. Nuestra filosofía de trabajo es clara: cuando se prueba un vino, se debe sentir el sabor del territorio, que nace en el viñedo y se expresa en las uvas.
Cada vino producido tiene su propia historia, su propia alma, y expresa las fases de nuestra existencia que pueden leerse en las características de cada vino individual. Barolo y los dos crü, Nebbiolo d'Alba, Barbera d'Alba, Dolcetto d'Alba y Nascetta son los protagonistas de este viaje por la Langa, real y fantástico.
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