Rioja es una comunidad autónoma de España, situada en el norte de la Península Ibérica. Hoy muy famosa por la producción de vinos finos, hasta mediados del siglo XIX contaba con productos que sólo se conocían localmente. Fue con la construcción del ferrocarril cuando sus vinos empezaron a ser apreciados en todo el mundo. En concreto, empresarios y enólogos franceses quedaron prendados de la excelente calidad de las uvas españolas e introdujeron en la zona tradiciones vinícolas típicamente francesas, como las famosas barricas de Burdeos. Las 3 zonas que componen Rioja, Alta, Baja y Alavesa, dan lugar a vinos diferentes, obtenidos en algunos casos mediante mezclas exclusivas de uvas de las 3 zonas. Mientras que los vinos de Rioja Baja tienen mayor graduación alcohólica y menor carácter distintivo, los de las otras dos zonas ostentan un carácter definitivamente original, fruto de un clima más fresco, influido por las preciadas corrientes marinas. También influye en la calidad de los vinos la particular composición del suelo, que mezcla arcillas, arenas y calizas en perfecto equilibrio. En conjunto, la zona es de primera importancia para la producción vinícola, y es la única de toda España que cuenta con producciones D.O.Ca.. Clasificados en categorías que van desde Joven a Gran Reserva, los vinos más extendidos son los tintos, cuyas principales variedades de uva son el Tempranillo y la Garnacha, seguidas de la uva Graciano. La producción de blancos está dominada por Garnacha blanca, Viura y Malvasía.