Les Freres Mignon

2019 será recordado para siempre por los hermanos Mignon, Florent y Julien, como un año especial porque durante esta temporada verán la luz las primeras botellas fruto de su 'Aventura' en el mundo del vino. Los hermanos descienden de una familia históricamente vinculada al mundo del vino, viticultores-propietarios de algunas hermosas parcelas en los municipios más vocacionales de la Cote des Blancs. Ya su bisabuelo producía vino a partir de los viñedos que él mismo cultivaba hasta que, en un momento dado, la familia decidió abandonar la producción, limitándose únicamente a la venta de las uvas. Eso hasta 2015, cuando Florent y Julien, en aquel momento de 28 y 24 años, decidieron entrar en escena como protagonistas y volver a la producción de su propio champán. Apoyados por la familia y, en particular, por su padre, sentaron las bases para la creación de una nueva bodega, consiguiendo finalizar las obras en poco menos de un año, justo a tiempo para la finalización de la cosecha de 2016. Dado que los viñedos son propiedad de varias generaciones, la mayor parte de las cepas cultivadas se obtienen por selección en masa. Hoy en día, la parcela de viñedo se divide de la siguiente manera: el 90% plantado con Chardonnay en las comunas de Avize, Cramant y Cuis, el 10% restante predominantemente Pinot Noir en Cumières. Se presta la máxima sensibilidad y atención a la gestión del viñedo, donde se siguen los dictados de la agricultura ecológica. En la bodega, la misma filosofía, opciones orientadas a la menor intervención posible: por ejemplo, el coteaux champenoise se embotella según el método ancestral "chèvre à deux becs", una práctica que no por casualidad siguen manteniendo los más grandes vignerons de Borgoña. La fermentación es espontánea con levaduras indígenas, no hay prácticas de filtración ni clarificación. Todo se lleva a cabo con un respeto casi maníaco por la materia prima.