Glengoyne

Glengoyne o Burnfoot (nombre original) fue fundada en 1833 por la familia Edminstone. Se encuentra a unos 15 km al norte de Glasgow, en la base de la colina de Dumgoyne, en la pintoresca región de los Trossachs. La familia Edminstone vendió la destilería en 1850 a la familia MacLelland, que en 1876 la vendió a Lang Bros, una empresa de mezclas de Glasgow. Tras la adquisición, Lang Bros cambió el nombre de la destilería de Burnfoot a Glen Guine y en 1905 se convirtió en Glengoyne. Glengoyne comenzó su producción como destilería de las Lowlands, de hecho, a pesar de los dos alambiques iniciales, aquí se destilaba whisky tres veces. En 1885, la destilería fue visitada por Alfred Barnard, quien informó de que la hermosa ubicación, al pie de una romántica cascada, era muy pintoresca, que la producción era de 200.000 litros de alcohol al año y que, "los licores se destilaban tres veces". La destilería de Glengoyne siguió siendo propiedad de Lang Bros hasta 1965, cuando fue vendida a Bobertson & Baxter, una empresa de corretaje de whisky de Glasgow que también tenía una participación en Highland Distilleries. Los nuevos propietarios reformaron la destilería y añadieron un tercer alambique. Para el Grupo Edrington, sin embargo, la destilería de Glengoyne no era una prioridad y decidió concentrar su trabajo en otras destilerías, por lo que Glengoyne fue vendida de nuevo a Ian MacLeod Distilleries Ltd, en 2003, por 7,2 millones de libras.

Hasta los años 70, el carácter de la destilería se reconocía como un producto de las Lowlands, pero desde hace muchos años, Glengoyne ha centrado su trabajo en la doble destilación y sus whiskies son ahora single malts con un carácter típico de las Highlands. La destilería realiza una combinación de varias fermentaciones con un tiempo que oscila entre las 56 y las 110 horas, mientras que la destilación es extremadamente lenta.