La propiedad de la familia Zárate se encuentra en el corazón del valle de Salnes, en Meano, en una casona del siglo XVI reconstruida en el XVIII. Alberga viñedos centenarios que expresan todas las características de la zona. La tradición de los Zárate comenzó en 1707 y hoy, tras siete generaciones, la familia sigue cuidando los viñedos y elaborando vino. El conjunto actual es de 6,4 hectáreas divididas en 11 parcelas independientes, el suelo donde crecen los viñedos es más bien pobre pero muy soleado. La principal variedad cultivada es la Albarino, la más representativa del valle de Salnes. Desde el año 2000, Eulogio Pomares, experto enólogo de Zárate, se encarga de los viñedos, implantando una viticultura respetuosa con el medio ambiente. La vendimia se realiza mediante selección manual para vinificar únicamente las partes más maduras y sanas que expresan la particularidad del terruño. El objetivo es devolver al suelo su equilibrio original, por lo que no se utilizan herbicidas ni pesticidas y los tratamientos se reducen al mínimo. Sin embargo, Eulogio hoy no renuncia a la tecnología, ha instalado una estación de control en cada parcela que examina las variables de la planta en relación con el clima, una vez recogidos, los datos se envían a un centro de control externo que tras analizarlos envía un mensaje a Eulogio que de esta forma es consciente de cuáles serán las mejores partes a elegir para elaborar el vino.
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