Sabatini

Cuatro miembros de las dos ramas de la familia Sabatini son los responsables de la creación de Sabatini Gin: Filippo, Enrico, Niccolò y el padre de los dos últimos, Ugo. Comparten una pasión por el ritual del aperitivo que se remonta a principios del siglo pasado en la familia. Una pasión que casó con el deseo de hacer algo que implicara a toda la familia. Sus diversos empleos, en marketing, finanzas y abogacía, les han llevado a trabajar a menudo y con éxito en el extranjero, pero los Sabatini siempre han mantenido estrechos lazos con su tierra natal, en particular con Cortona y Teccognano, la localidad toscana en el corazón de la Valdichiana que dio nombre a la empresa en 2015. Aquí se encuentran las residencias familiares, adquiridas por los bisabuelos a principios del siglo XX: Villa Sabatini y Villa Ugo, esta última centro de florecientes actividades turísticas. La pasión por el mundo de los espirituosos, en la familia Sabatini, comenzó a principios del siglo pasado, con Guglielmo Giacosa, abuelo materno de Ugo Sabatini. Nacido a finales del siglo XIX en Alba y diplomado en enología, llevó sus conocimientos a Sudamérica y Australia, trabajando para una gran marca de vermut y abriendo su propia destilería. El compromiso y la pasión de los cuatro fundadores permitieron a la empresa establecerse no sólo en el mercado nacional, sino también en el internacional. Una empresa joven con una tradición centenaria que hoy cuenta con una línea de productos que representan plenamente la cultura y la calidad del "Made in Italy".